El pasado miércoles 25 de octubre el Club Taurino del Colegio Mayor Belagua, en la Universidad de Navarra, acogió un coloquio para acercar la tauromaquia a los universitarios. El protagonista de la encerrona fue Pablo Aguado y el público, que casi firma un no hay billetes en el auditorio, fueron jóvenes universitarios de toda España que estudian en Pamplona.
El invitado resultó ideal para establecer un diálogo con los inquietos estudiantes ya que, debido a su edad y a que también estuvo estudió una carrera como ellos, se generó un clima de confianza y cercanía que permitió sacar muchos temas de conversación sin ningún tapujo.
Los asistentes escucharon a Pablo hablar sobre lo aprendido en su vida universitaria, de la vida y la muerte, sobre el sentimiento de un torero ante el toro, de los valores de la tauromaquia y de sus aficionados. También animó a los estudiantes a ser valientes en esta etapa de su vida en la que hay que tomar tantas decisiones y buscar la verdad inspirados por los valores del toreo.
Los aficionados conocían la sencillez y la naturalidad con la que Pablo torea, pero también querían conocer a la persona que está bajo el traje de luces y así lo demostraron cuando se abrió el micrófono al público, que hizo preguntas muy personales y que mostraban la inquietud con la que acogieron su mensaje.
Pablo volvió a Sevilla, pero dejó una mirada muy esperanzada respecto al futuro de la fiesta y la juventud, que se corroboraba con la acogida y repercusión que tuvo el acto en la Universidad. Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que supone un gran avance tratar estos temas libremente en las universidades. Cómo dijo Pablo antes de comenzar el coloquio: “los toreros tenemos que estar en estas cosas”.
Ignacio de Grassa