El martes 15 por la tarde, en el Aula Magna del Edificio Central de la Universidad de Navarra, tuvo lugar el acto de inicio del curso académico del Colegio Mayor Belagua. Donde cerca de 700 personas, entre colegiales, profesores e invitados, dieron el pistoletazo de salida a un nuevo curso académico en el que cada vez la vida colegial adquiere mayor protagonismo.
Al comienzo de la solemne ceremonia, se procedió a la lectura de la Memoria del curso pasado (14-15) por parte del actual Decano de Fase I Santiago Soriano. En ella se rememoraron las múltiples actividades que desde las distintas sedes del Colegio Mayor Belagua se impulsaron a lo largo del año. Destacaron las actividades formativas, culturales, deportivas e incluso las efectuadas en verano.
Seguidamente, fue Javier Casanova, Director del C.M. Belagua el que se dirigió a la concurrencia agradeciendo la asistencia e implicación de los presentes, sin olvidar al Patronato del Colegio Mayor. Casanova dijo que “no solo se forma en las aulas” y destacó que la misión de Belagua debía ser “formar a universitarios con afán de servicio”. También quiso destacar la mejora de las instalaciones del Colegio Mayor, la creación de una Comisión de estudios y un Comité académico y la preparación de actividades futuras en Belagua. Para finalizar su intervención, pidió a los colegiales implicación en los proyectos por venir en el curso inaugurado.
El momento central del acto fue la intervención del invitado, el Catedrático en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, Esteban López-Escobar. Quien además fue elegido presidente de la WAPOR (World Association for Public Opinion Research) en 2005, formó parte del Consejo del International Institute of Communications en Londres y fue parte de la Primera Promoción de colegiales del C.M. Belagua, entre otras muchas cosas.
López-Escobar pronunció una ponencia que él quiso titular “La cuarta pared”. Durante la misma, recordó sus tiempos de juventud en Belagua y las actividades que allí realizó. Además compartió experiencias vitales y contó anécdotas que conmovieron a la concurrencia. Quiso terminar diciendo haber hablado “desde un escenario de teatro y misericordia”, tras lo que alzó una copa y brindó por todos los presentes.
Para finalizar la ronda de intervenciones, habló el Vicerrector de Alumnos de la Universidad, Tomás Gómez-Acebo. Trasladó las preocupaciones del Rectorado a los colegiales de Belagua, donde destacó que “la Universidad debe apostar por los proyectos formativos de los Colegios Mayores”.
Como colofón a una inolvidable velada, todos los presentes se pusieron en pie y entonaron el ya tradicional Gaudeamus Igitur.